Es fuente de calcio, potasio, hierro, yodo, magnesio, zinc, vitamina A y vitaminas del complejo B.
El limón es una fruta a la que se le atribuyen muchos beneficios para el organismo. Contiene vitamina C y fibra, que ayudan a la digestión al promover el tránsito intestinal, al tiempo que permite eliminar líquidos retenidos en el cuerpo, convirtiéndose en un diurético natural. También es una fuente de calcio, potasio, hierro, yodo, magnesio, zinc, vitamina A y vitaminas del complejo B.
Adicionalmente, ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y apoyar el tratamiento de afecciones como la gripa, los resfriados, la fiebre y las infecciones bacterianas.
Aliado de la sangre
También dice que es beneficioso para conservar la sangre en buena condición. El fruto tendría efectos coagulantes, gracias a que con el calcio que ofrece al organismo, consigue mejorar la densidad de la sangre y mantenerla en los niveles adecuados. De igual forma, como es fuente de hierro, ayuda a aumentar la cantidad de hemoglobina en el organismo, facilitando que el oxígeno llegue a todo el cuerpo.
Un artículo publicado en el diario El Universal, de México, refiere un estudio publicado en The Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism, en el que se concluye que los cítricos contienen una sustancia antioxidante llamada hesperidina. Este compuesto estimula la producción de óxido nítrico, un vasodilatador que relaja las paredes de las arterias, facilitando la circulación de la sangre.
Asimismo, el mencionado componente disminuye la inflamación y la rigidez de los vasos sanguíneos en personas con síndrome metabólico. Ambos factores están ligados a un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, asegura la Sociedad Chilena de Obesidad, por lo que con su consumo regular se reduce la posibilidad de enfrentar este tipo de afecciones.
Un beneficio más relacionado con la sangre es que gracias a sus antioxidantes, este fruto cítrico ayuda a purificarla. “Gracias a esto, se facilita la eliminación de desechos y sustancias tóxicas presentes en el torrente sanguíneo, previniendo enfermedades relacionadas con el sistema circulatorio y cardiovascular”, precisa una publicación de la revista Mejor con Salud.
Fuente: Semana.com