El cambio climático se ubica como uno de los principales desafíos que enfrentan los productores de cítricos, que buscan hacer un manejo integrado de plagas. En entrevista con Frutas de Chile, Natalia Olivares, entomóloga y asesora del Comité de Cítricos de Frutas de Chile explicó que “es fundamental adaptar las estrategias del manejo integrado de plagas (MIP) a estos cambios y mantener en constante dinámica el estudio de la biología y comportamiento a nivel de campo de las plagas en diferentes localidades citrícolas y así poder realizar manejos asertivos. En este sentido se ha desarrollado con el Comité de Cítricos un proyecto de la fenología de Escama Roja (Aonidiella Aurantii) existiendo hoy avances sólidos en este tema, en el cultivo del limonero. Además, se está ejecutando la primera etapa del proyecto de modelo de grados días de Proeulia spp en cítricos”.
De acuerdo con la experta, es importante considerar que el principal desafío del MIP es mantener las poblaciones de plagas por debajo del nivel de pérdidas económicas, pero integrando herramientas para producir el mínimo impacto en el medio ambiente. “No sólo debe considerarse el control químico, biológico y físico, como parte del MIP, sino que es relevante incorporar tecnología de precisión y herramientas de apoyo a la toma de decisiones (software de monitoreo, identificación molecular de plagas, entre otras), realizar continuamente investigación y desarrollo en el manejo de las plagas, uso de variedades resistentes, entre otros”, indicó.
Al respecto, el Comité de Cítricos de Frutas de Chile ha desarrollado la aplicación MIPCitrus, que contiene a la fecha información de las principales plagas presentes en cítricos, así como también la estimación de volumen de aplicación. “MIPCitrus no tiene costo, se encuentra disponible para IOS y Android, en ella podrán encontrar una ficha técnica conteniendo: reconocimiento y biología, daño y estrategia como también una galería de fotos con los estados de desarrollo de las plagas”, destacó Olivares.
Sobre si el clima ha jugado un desafío importante tanto para presión en plagas, la especialista señaló que “tanto insectos como ácaros responden a las temperaturas, ya sea acelerando o disminuyendo su tasa de crecimiento poblacional, incidiendo en la abundancia de las plagas, número de generaciones y sobrevivencia. Por otro lado, la fenología del cultivo se ve afectada en parte por factores ambientales. Bajo este contexto, los estudios de estacionalidad de las plagas presentes en cítricos son muy relevantes para su manejo”.
Respecto a qué medidas deben tomar los productores para enfrentar estas plagas, Olivares sostuvo: “Lo básico es conocer la plaga en el campo, es por ello por lo que el monitoreo es fundamental en la detección, seguimiento, definición de oportunidad y resultados del control. En relación con las plagas Proeulia sp y Escama Roja existe menos información respecto a su fenología en cítricos, es por ello por lo que se están estudiando en condiciones de campo”.
Estrategias en la implementación del MIP
El manejo integrado de plagas se ubica como una estrategia de manejo sustentable orientado a minimizar los daños en el ambiente, y se entiende igual para todos los cultivos. El MIP combina diferentes herramientas para manejar las poblaciones de las plagas, entre ellas monitoreo de las plagas y sus enemigos naturales, control cultural, control físico, control biológico y control químico. La asesora del Comité de Cítricos detalló que “de acuerdo con la FAO, el MIP se define como la cuidadosa consideración de todas las técnicas disponibles para el control de plagas y la subsecuente integración de medidas que desincentiven el desarrollo de sus poblaciones y mantenga los plaguicidas y otras intervenciones en niveles económicamente justificados, reduciendo o minimizando los riesgos para la salud humana y el medio ambiente”.
Sobre cuáles son los manejos importantes y que no deben olvidar los productores de cítricos, Olivares comentó que es importante destacar que el manejo de plagas debe basarse en una estrategia integrada, enfatizando el monitoreo de éstas y evitar realizar acciones calendarizadas. Para el manejo de plagas, se deben reconocer la o las especies de plagas presentes, los diferentes estados de desarrollo y en qué estructuras del cultivo se encuentran. “Además, muy relevante es que el personal encargado de realizar el monitoreo esté continuamente en entrenamiento, esto, debido al cambio en el comportamiento del desarrollo de las plagas, debido principalmente a las condiciones climáticas. En este contexto, estamos realizando capacitaciones con el Comité de Cítricos, de reconocimiento y monitoreo de plagas. En enero 2024 ya hemos avanzado con las especies Proeulia sp y Aonidiella aurantii. Se continuará reforzando mediante capacitaciones en reconocimiento y monitoreo, con el fin de realizar manejos en el campo con información técnica para las plagas de importancia en cítricos”, agregó.
Las acciones de control que se tomen deben estar sincronizadas con la fenología de la plaga y el cultivo, indicó la experta. “Por esta razón es tan importante definir la oportunidad de control mediante el monitoreo de las plagas. Es por ello por lo que el entrenamiento de los monitores es clave”, concluyó.
Fuente: Simfruit